Jornada del Día Mundial de la Terapia Ocupacional en Zaragoza: una profesión desconocida

El viernes 27 de octubre de 2023 fue el Día Mundial de la Terapia Ocupacional, y nuestra delegada en Aragón, Montse Sonsona, acudió a la sesión de tarde de la Jornada organizada por COPTOA, el Colegio Profesional de Terapeutas Ocupacionales de Aragón, para divulgar la TO.

La Terapia Ocupacional es una profesión socio-sanitaria que tiene como objetivo que la persona aumente su independencia y gane calidad de vida en las actividades del día a día, tareas del hogar, aseo, cocina, ocio, trabajo, escuela… mediante ocupaciones con un propósito, adaptación de tareas, e intervenciones en su entorno.

Aunque en la Mesa Redonda de Geriatría se habló sobre todo de personas mayores en residencias, se tocaron temas que se podrían aplicar a las personas discapacitadas en general.

En esta mesa, titulada “Promoviendo el bienestar integral del adulto mayor”, hablaron: Jesús Marta, Alicia Ezquerra Longás, Raquel Mª Quilez Ezquerra y Laura Peralta Pallarés. Aprendimos cómo trabajan, cómo intentan darle la vuelta a todo e integrar a pacientes, familia, cuidadores, y la sociedad, para mejorar la atención, poniendo en el centro a la persona.

En la mesa de la entrada pudimos ver muchos objetos que sirven de ayuda para comer, vestirse, escribir… esto nos motiva a ponernos en contacto con estas profesionales para saber más acerca de cómo nos podrían ayudar a facilitarnos la vida diaria un poquito.

Especialmente interesante fue escuchar cómo se ocupan también de los familiares cuidadores, algo perfectamente aplicable a nuestro caso, ya que al ser el SED y el TEH una enfermedad genética, muchas afectadas son enfermas a la vez que cuidadoras de sus madres, padres y abuelos/as. Y también de sus hijas/os.

Nos ha hecho reflexionar también sobre qué nuevos obstáculos nos vamos a encontrar conforme vamos envejeciendo, siendo discapacitadas, y de qué ayudas disponemos.

Aunque en el debate se recalcaba constantemente la importancia de la dignidad de la persona y de preguntarle qué quiere y qué no quiere, evitando siempre la infantilización, el tema de base era la dificultad de evitar caídas sin recurrir a las contenciones y sujeciones, ni a rescates farmacológicos, y qué alternativas hay a esto, las complicaciones en pacientes con demencia, cómo se reorganizan en las residencias que aplican el programa cero sujeciones; además de la dificultad de aplicar esto en un entorno hospitalario, donde las pacientes con vías centrales con antibióticos están en riesgo de sepsis si se mueven, se caen, o si se las quitan.

Nos relataron su experiencia en residencias donde analizan las caídas, por qué han sucedido, y buscan arreglarlo con inventiva y métodos alternativos más humanos, que requieren más paciencia y muchos cambios: 

    • Se habló de la importancia del espacio donde el paciente pasa todo el día: la luz en las residencias, el diseño de los pasillos para que se pueda pasear sin fin.
    • El poder beber agua y el poder ir al cuarto de baño.
    • Ejercicios para fortalecer las piernas y caerse menos.
    • La pérdida de noción del tiempo, y la importancia de la radio como elemento orientador.
    • Un punto a destacar por desgracia es la soledad no deseada.
    • Recordar que la infantilización es la puerta a los malos tratos.
    • La importancia del acompañamiento terapéutico, tanto a afectadas como a familiares. La importancia de hablar y charlar. Porque hacer terapia puede ser simplemente estar acompañados y hablar de cosas del día a día.
    • La desmotivación de pintar y de hacer ejercicio porque sí, sin un propósito, que aburre a cualquiera, tenga la edad que tenga.
    • Entender que la dignidad es también querer estar peinada y verte arreglada aunque no veas a nadie y estés en tu casa todo el día.
    • Hablar para saber qué motiva y qué gusta a cada persona.
    • Se ha visto que la gente mayor y la gente joven puede aportarse cosas mutuamente.
    • La necesidad de impulsar programas en las ciudades y en el entorno rural desde centros de salud o desde entidades locales.

Es fundamental entender la fractura de roles que se da al ser mayor, y al convertirte en una persona dependiente. Dejas de ser cuidadora de hijos o nietos, dejas de trabajar, de salir, no puedes continuar con tus quehaceres diarios ni hobbies ni quedar… vas perdiendo los roles que tenías en tu vida, y hay que re-enfocar eso mediante la terapia ocupacional.

Un punto clave es el trabajar en la Formación de los cuidadores no profesionales, además de darles también apoyo terapéutico. Enseñarles a realizar transferencias, para que no se caigan los dos, sobre todo porque la mayoría de cuidadoras son mujeres mayores que deben movilizar a sus maridos, los cuales les doblan el peso y el tamaño, y se caen ambos. Hay que enseñar a los cuidadores a cuidar y a vivir en este nuevo rol y encontrar de nuevo tu identidad. De hecho, el Gobierno de Aragón ofrece el programa de apoyo “CuidArte”, tanto para personas dependientes como para sus cuidadoras/es:

Y que sobre todo, recordemos que nosotros también envejeceremos y nos veremos así, de manera que lo que logremos avanzar ahora para mejorar su situación, repercutirá en nosotros/as cuando estemos en su lugar.

La conclusión fue que hay que dignificar a la persona, y para ello la Terapia Ocupacional es la gran desconocida: la importancia del hacer.

Muchas gracias a las y a los profesionales que hablaron, por mostrarnos una humanidad tan grande en los cuidados profesionales, y tanto esfuerzo por mejorarlos.


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